27 febrero 2011

EDUCAR BIEN?

Hace días que ando “dispersa“por el espacio de mis pensamientos y no tenía nada interesante que poner en mi rincón paranoico, hoy tocaba ya.
Un domingo primaveral para salir de casa, cualquier excusa es válida. La mía ha sido ir a caminar al Parque para mover un poco el esqueleto. La otra alternativa que tenía era madrugar a las 6 para caminar en La Montaña, pero pudo más quedarse en la cama y opté por la primera. Antes de ir a caminar al Parque pasé a ver a mi sobrino jugar al futbol así disfrutar de la familia que también es importante. Mi sorpresa fue cuando veo a eso padres violentos, encrespando al árbitro, insultos y palabrotas, gritos y malos modos, todo un ejemplo para los hijos. Me fui cinco minutos antes de terminar el partido, aquello me sobraba. A los poco de retirarme y ya metida en el paseo me llamó mi hermana para decirme que uno de los padres del equipo contrario haciendo uso de su mala educación y sobrada violencia salió al campo a pegar…supongo que al árbitro (los niños tienen entre once y doce años) y la armó, el espectáculo del frustrado y acomplejado padre, claro…vino la policía. Ya algo me decía que aquello no tenía ambiente deportivo. Es una vergüenza, aunque ellos se ven machotes y con su razón, lo vulgar y la mala educación es lo que predomina actualmente.
Yo nací en un barrio y mi padre fue un obrero. Mi familia goza de buena educación y nos sobra los buenos modales. Mi padre nunca usó una palabrota en su vocabulario y nosotros, sus hijos, ni se nos ocurría, ahí podrá aparecer la mano de mi madre censurándola con un toque seco, justo y efectivo. Pero hay quienes piensan lo contrario, y tienen cono carta de presentación la mala educación pues como son de barrio.
En fin.
Por otro lado, siempre ánimo a los padres a que pongan a sus hijos a realizar deporte, los de grupo se suponen que sirven para fomentar el trabajo en equipo, el esfuerzo, el compañerismo y muchas más cosas. Los entendidos también lo aconsejan. Pero después, ves estas cosas y no sabes si vale la pena. Y hoy, en ese momento que fui a ver a mi sobrino me vino la duda y la vergüenza, niños pequeños viendo esa violencia, qué le estamos enseñando?
FOTO: (mía) Fortaleza de Masca, haciendo deporte con amigos.