03 octubre 2007

ORIGENES



Mira que pasa los días, años y es ahora cuando miro de una forma diferente los orígenes…la tierra de mis padres,
en una simpática conversación referente al pueblo de mis padres
Siempre he tenido una admiración por ese macizo, Macizo de Anaga. De hecho, es una de mis zonas preferidas para caminar, perderme entre sus paisajes.
Lo recomiendo.
Pero ahora, después de mirarlo con ojos nostálgicos, se me hace diferente…entrañable, como si fuera parte de mi, lo es, pero ajena mucho tiempo a que así fuese. Ahora, aunque siga pateándola…miraré en sus cumbres, historias pasadas, risas, sueños…en sus barrancos escucharé la risa de niños jugando con el agua que corre…en la sombra de los brezos cuchichean dos mujeres en voz baja…siento el esfuerzo de hombres en las huertas, en las laderas. El domingo de descanso en la plaza…Me traslado imaginando mis orígenes, es grato sentir esto con una sonrisa

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sentirse formar parte de un lugar es reconocer que somos o fuimos o seremos parte de el y que el es o fue o sera parte nuestra.

Bueno, yo me aclaro.

Un surrealista